EL DIA DEL OJI ("NO")

   

Todos los años Cariátide, Asociación Argentina de Cultura Helénica, concluye su ciclo de actividades con un cultural en homenaje a Grecia en conmemoración de la fecha patria del "Oji (No)", el 28 de Octubre.

Este homenaje se ha realizado a través de diversas manifestaciones culturales en varias ocasiones auspiciadas por la Embajada de Grecia en Buenos Aires, la Secretaría de Cultura de la Nación, la Secretaría de Educación y Cultura de la Municipalidad de Buenos Aires, la Comisión Nacional de la Manzana de las Luces y otras entidades, las cuales han tenido lugar en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Católica Arentina (1979), el Teatro Nacional Cervantes (1980), el Fondo Nacional de las Artes (1982), la Fundación Banco de Boston (1984), la Sala de Representantes de la Manzana de las Luces (1985-1992, 1994-97), el Aula Magna del Centro de Estudios de Posgrado de la Universidad de Palermo (1993, 2003), el teatro la Scala de San Telmo (1999), el Salón Dorado de la Casa de la Cultura del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires (2000), el Club del Progreso (2001) y el Diario del Viajero (2002), entre otros.

En el programa de mano del concierto de música griega realizado en 2000 para dicha ocasión, el entonces Presidente de Cariátide, Dr. Alejandro Jorge Padilla, vertió los siguientes conceptos:  

“28 de Octubre de 1940. Atenas, Grecia. 3 A.M. El embajador italiano E. Grazzi visita al Primer Ministro griego, Ioánnis Metaxás. Lo despierta y le entrega un ultimátum según el cual Italia, para su seguridad, exige ocupar bases y otros puntos del territorio griego que considere necesarios, los cuales utilizará hasta el término de la gran guerra, guerra en la cual Grecia había mantenido hasta el momento, pese a las muchas presiones, una postura neutral. La respuesa debía darse antes de las seis de la mañana. Metaxás, con voz dolorida pero firme rechaza el ultimátum, y en este negativa se origina la leyenda del “Oji” (¡No!).

Grecia es forzada a la guerra, mientras las tropas de Mussolini invaden el país desde Albania. Más tarde, les seguirán las de Hitler a través de Bulgaria y Yugoslavia. Olas de sangre, terrible sufrimiento, la resistencia pasiva a través de la no cooperación, actos de extraordinario heroísmo, sabotaje, formación de grupos guerrilleros. Fieles a su historia, cuna de las humanidades y origen de todo aquello que Occidente considera hoy más preciado, los griegos afrontaron con coraje el desafío de los tiranos, contribuyendo a su derrota con un grito al unísono que desmembró y al mismo tiempo unificó a toda Grecia: no a la barbarie, no a la prepotencia, no al sometimiento.

Laurence Durrell, el célebre autor inglés del maravilloso Cuarteto de Alejandría y presente en los eventos, dijo en su libro de viajes  Las islas griegas: «Se había pronunciado una palabra, una sola palabra que toda Europa había esperado en vano. La palabra “no” (oji), que Grecia había proferido en nombre de todos nosotros en un momento en que todas las llamadas grandes potencias se rebajaban, adulaban o intentaban contemporizar ante la amenaza nazi. Con es pequeña palabra Grecia encontró su alma, y Europa un ejemplo. Una nación pequeña, casi desarmada y dividida decidió uan vez más desafiar a las hordas persas tal como lo habían hecho en el pasado.»

 

Y como dijera el pasado 7 de Octubre de 2003 el Presidente de Cariátide, Prof. Igor Andruskiewitsch, en sus palabras de agradecimiento a la Embajada de Grecia en ocasión de concluir el ciclo anual de conferencias que tuvo lugar en la sede de dicha embajada>:

«"Oji" significó "No" al fascismo y al nazismo, la barbarie de aquellos tiempos. Pero el "Oji" es permanente a la incultura y a la barbarie que siempre existe en el mundo, a veces en proporciones intolerables.

El "Oji" se puede decir si uno tiene detrás un "Sí", y ese "Sí" está en la cultura griega, que es la cuna de todas las demás culturas de europa hasta el día de hoy. Y nuestra Asociación "Cariátide" se dedica desde hace veinticinco años a decir que hay una alternativa. Que inclusive hoy hay una luz, una especie de faro, que puede estar con una luz más fuerte o débil, pero lo importante es que esté en un lugar adecuado.

El faro de Grecia es el lugar más correcto en la historia de la humanidad, y sigue estando en su lugar. No cambió ni dejó de emitir su luz. Y nosotros, dentro de nuestras modestas posibilidades y las dificultades existentes, tratamos de llamar la atención sobre esta luz. No damos ninguna luz, sino que llamamos la atención sobre aquella que existe desde hace 3000 años y de la cual tenemos mucho que aprender. Tanto cada uno de nosotros, como, creemos, todo el mundo actual.»

 

 

de izquierda a derecha:                                         Prof. Igor Andruskiewitsch, Dr. Alejandro Jorge Padilla

1